Palabra de Vida 8/5/18:
«Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito»
Por P. Jesús Higueras
«Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito»
Por P. Jesús Higueras
Camino Católico
Publicado el 8 may. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Espacio "Palabra de Vida" de 13 TV del 8 de mayo de 2018, martes de la 6ª semana de Pascua, presentado por el padre Jesús Higueras, en el cual se comenta el evangelio del día.
Evangelio: San Juan 16, 5–11:
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: “¿Adónde vas?” Sino que, por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. Sin embargo, os digo la verdad: os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio, si me voy, os lo enviaré.
Y cuando venga, dejará convicto al mundo acerca de un pecado, de una justicia y de una condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia, porque me voy al Padre, y no me veréis; de una condena, porque el príncipe de este mundo está condenado».
«Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: “¿Adónde vas?” Sino que, por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. Sin embargo, os digo la verdad: os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio, si me voy, os lo enviaré.
Y cuando venga, dejará convicto al mundo acerca de un pecado, de una justicia y de una condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia, porque me voy al Padre, y no me veréis; de una condena, porque el príncipe de este mundo está condenado».
Padre Don: Jesús Higueras Esteban
00:22
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito». Uno de los nombres efectivamente que tiene el Espíritu Santo es esa palabra griega Paraclito que significa tanto consolador, como abogado defensor. Que bonito porque Cristo, de algún modo dice: «Yo me tengo que ir», en el sentido de yo desaparezco de vuestra vista en sentido corporal, de la palabra.
00:44
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Ya no me vais a volver a ver de un modo visible como me estáis viendo hasta ahora. Porque entonces cuando Cristo desaparece visualmente es cuando entonces el Espíritu Santo interviene. Y comienza el tiempo ya digamos de la Fe y de la Confianza más absoluta. Por tanto es verdad, convenía que Jesucristo no estuviera con nosotros, visualmente para que el Espíritu Santo Intervenga. Cuando Jesucristo dice que me voy, no quiere decir que se quita de en medio.
01:13
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Se refiere a esa dimensión visual, porque Jesucristo por ejemplo pues se queda en la Eucaristía. Él sigue en el mundo, Él sigue en la tierra porque está en cada Sagrario. Jesucristo no se va porque además Él está en el alma de cada Bautizado. Jesucristo vive en cada uno de nosotros, lo decía San Pablo de un modo muy bonito: «Vivo yo pero no soy yo, es Cristo el que vive en mí», decía San Pablo. Jesucristo por supuesto está también en la Liturgia, en la Sagrada Escritura.
01:38
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Jesucristo está en el pobre, en la persona que sufre, en el enfermo. Es decir, cuando Jesús dice: «que me voy», no quiere decir que es que, se quita de en medio para desentenderse de este mundo. Si no que quiere decir, es que no quiere que le veamos como le veían los Apóstoles ¿para qué?, para que sea el momento efectivamente de invocar el Espíritu Santo, de que venga el Paráclito. Y que el Paráclito nos fortalezca en la Fe, el Paráclito nos convenza de todo lo que Jesucristo hizo y enseñó.
02:05
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Efectivamente comienza el tiempo del Espíritu Santo, que es aquel que como que nos llena de la vida de Dios. Pues en definitiva el Espíritu Santo, sabemos muy bien que es el Eterno Amor que ha existido entre el Padre y el Hijo. Pues vamos a pedirle al Señor con motivo de este Evangelio que hemos escuchado hoy. Que sepamos descubrir la presencia invisible de Cristo en cada uno de los momentos de nuestra vida. Y además quién lo va a hacer descubrir es el Espíritu Santo.
02:34
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Nadie viene a mí decía Cristo si mi Padre no lo atrae». Esa atracción hacia Cristo es el Espíritu Santo. La pregunta es ¿dónde te encuentras con Cristo? Lo encuentras cuando asistes a la Santa Misa, lo encuentras cuando haces Oración, dentro de tu corazón. Lo encuentras en tu Cruz, en tu sufrimiento, en tus limitaciones. Ahí está el Señor, ojalá que todos podamos decir: «Señor Espíritu Santo, ven sobre mí, para que con tu ayuda y con tu inspiración, yo me encuentre con Cristo donde él me está esperando.
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito». Uno de los nombres efectivamente que tiene el Espíritu Santo es esa palabra griega Paraclito que significa tanto consolador, como abogado defensor. Que bonito porque Cristo, de algún modo dice: «Yo me tengo que ir», en el sentido de yo desaparezco de vuestra vista en sentido corporal, de la palabra.
00:44
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Ya no me vais a volver a ver de un modo visible como me estáis viendo hasta ahora. Porque entonces cuando Cristo desaparece visualmente es cuando entonces el Espíritu Santo interviene. Y comienza el tiempo ya digamos de la Fe y de la Confianza más absoluta. Por tanto es verdad, convenía que Jesucristo no estuviera con nosotros, visualmente para que el Espíritu Santo Intervenga. Cuando Jesucristo dice que me voy, no quiere decir que se quita de en medio.
01:13
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Se refiere a esa dimensión visual, porque Jesucristo por ejemplo pues se queda en la Eucaristía. Él sigue en el mundo, Él sigue en la tierra porque está en cada Sagrario. Jesucristo no se va porque además Él está en el alma de cada Bautizado. Jesucristo vive en cada uno de nosotros, lo decía San Pablo de un modo muy bonito: «Vivo yo pero no soy yo, es Cristo el que vive en mí», decía San Pablo. Jesucristo por supuesto está también en la Liturgia, en la Sagrada Escritura.
01:38
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Jesucristo está en el pobre, en la persona que sufre, en el enfermo. Es decir, cuando Jesús dice: «que me voy», no quiere decir que es que, se quita de en medio para desentenderse de este mundo. Si no que quiere decir, es que no quiere que le veamos como le veían los Apóstoles ¿para qué?, para que sea el momento efectivamente de invocar el Espíritu Santo, de que venga el Paráclito. Y que el Paráclito nos fortalezca en la Fe, el Paráclito nos convenza de todo lo que Jesucristo hizo y enseñó.
02:05
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Efectivamente comienza el tiempo del Espíritu Santo, que es aquel que como que nos llena de la vida de Dios. Pues en definitiva el Espíritu Santo, sabemos muy bien que es el Eterno Amor que ha existido entre el Padre y el Hijo. Pues vamos a pedirle al Señor con motivo de este Evangelio que hemos escuchado hoy. Que sepamos descubrir la presencia invisible de Cristo en cada uno de los momentos de nuestra vida. Y además quién lo va a hacer descubrir es el Espíritu Santo.
02:34
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Nadie viene a mí decía Cristo si mi Padre no lo atrae». Esa atracción hacia Cristo es el Espíritu Santo. La pregunta es ¿dónde te encuentras con Cristo? Lo encuentras cuando asistes a la Santa Misa, lo encuentras cuando haces Oración, dentro de tu corazón. Lo encuentras en tu Cruz, en tu sufrimiento, en tus limitaciones. Ahí está el Señor, ojalá que todos podamos decir: «Señor Espíritu Santo, ven sobre mí, para que con tu ayuda y con tu inspiración, yo me encuentre con Cristo donde él me está esperando.
Santa Misa del martes 8 de mayo de 2018, 6ª Semana de Pascua
Camino Católico
Publicado el 8 may. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Celebración de la Santa Misa del martes de la 6ª semana de Pascua, presidida por el P. José Blanco, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Inicio de la Santa Misa y Dedicación
00:26
Padre Don: José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
℣. El Dios de la Vida que ha Resucitado a Jesucristo rompiendo las ataduras de la muerte esté con todos vosotros.
Y con tu espíritu.
00:31
Padre Don: José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
00:44
Padre Don: José Blanco:
Hermanos buenos días, sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la 6ª Semana de Pascua. Vamos avanzando ya y el Tiempo de Pascua va terminando pero todavía tenemos que gozar de ese clima de alegría y de esperanza por el Señor Resucitado. Un saludo muy cordial y cercano a todos aquellos hermanos nuestros, que a través del Canal 13 Televisión se unen a nosotros en la Celebración. Y ahora en un momento de silencio pedimos perdón al Señor por nuestros pecados.
01:36
Padre Don: José Blanco:
℣. Tú que eres la plenitud
de la verdad y de la gracia
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que te has hecho pobre
para enriquecernos
℣. Crito, Ten Piedad
℟. Crito, Ten Piedad
℣. Tú porque has venido
para hacer de nosotros
tu pueblo Santo
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedadn
01:57
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios Todopoderoso
Tenga Misericordia de Nosotros
Perdone Nuestros Pecados
y Nos Lleve a la Vida Eterna.
℟. Amen.
02:05
Padre Don: José Blanco:
Oremos.
que tu pueblo Señor
resulte siempre al verse
renovado y rejuvenecido
en el Espíritu
y que la alegría de haber
recobrado la adopción
filial afiance
su esperanza de Resucitar
gloriosamente
por Nuestro Señor Jesucristo tu Hijo
que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 16, 22-34 1ª lectura: Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia.
02:48
Lectora de la Primera Lectura: - En aquellos días, la plebe de Filipos se amotinó contra Pablo y Silas, y los magistrados ordenaron que les arrancaran los vestidos y que los azotaran con varas; después de molerlos a palos, los metieron en la cárcel, encargando al carcelero que los vigilara bien; según la orden recibida, él los cogió los metió en la mazmorra y les sujetó los pies en el cepo.
A eso de media noche, Pablo y Silas oraban cantando himnos a Dios. Los otros presos los escuchaban. De repente, vino una terremoto tan violento que temblaron los cimientos de la cárcel. Al momento se abrieron todas las puertas, y a todos se les soltaron las cadenas. El carcelero se despertó y, al ver las puertas de la cárcel de par en par, sacó la espada para suicidarse, imaginando que los presos se habían fugado. Pero Pablo lo llamó a gritos, diciendo:
«No te hagas daño alguno, que estamos todos aquí».
03:54
Lectora de la Primera Lectura: - El carcelero pidió una lámpara, saltó dentro, y se echó temblando a los pies de Pablo y Silas; los sacó fuera y les preguntó:
«Señores, ¿qué tengo que hacer para salvarme?». Le contestaron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia».
Y le explicaron la palabra del Señor, a él y a todos los de su casa.
A aquellas horas de la noche, el carcelero los tomo consigo, les lavó las heridas, y se bautizó en seguida con todos los suyos; los subió a su casa, les preparó la mesa, y celebraron una fiesta de familia por haber creído en Dios.
℣. Palabra de Dios.
℟. Te alabamos, Señor.
04:39
Lector del Salmo Responsorial:
Salmo: Sal 137, 1-2a. 2bc y 3. 7c-8 Tu derecha me salva, Señor.
℣. Tu derecha me salva, Señor.
℟. Tu derecha me salva, Señor.
℣. Te doy gracias, Señor,
de todo corazón; porque
escuchaste las palabras
de mi boca; delante
de los ángeles tañeré
para ti, me postraré
hacia tu santuario. ℟.
℣. Daré gracias a tu nombre
por tu misericordia
y tu lealtad, porque
tu promesa supera tu fama
Cuando te invoqué,
me escuchaste, acreciste
el valor en mi alma. ℟.
℣. Tu derecha me salva.
El Señor completará
sus favores conmigo:
Señor, tu misericordia
es eterna, no abandones
la obra de tus manos. ℟.
05:28
Canto del Aleluya:
Aleluya Col 3, 1 Os enviaré el espíritu de la verdad - dice el Señor -, él os guiará hasta la verdad plena.
05:27
Canto del Aleluya:
℣. Aleluya, aleluya, aleluya
℣. Os enviaré el espíritu
de la verdad
- dice el Señor -,
él os guiará hasta
la verdad plena. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
✠ Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 5-11 Evangelio: Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito
06:13
Padre Don: José Blanco:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Juan.
℟. Gloria a ti Señor Jesús.
06:24
Diácono de la Basílica - Evangelio: - En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: “¿Adónde vas?” Sino que, por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. Sin embargo, os digo la verdad: os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio, si me voy, os lo enviaré. Y cuando venga, dejará convicto al mundo acerca de un pecado, de una justicia y de una condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia, porque me voy al Padre, y no me veréis; de una condena, porque el príncipe de este mundo está condenado».
℣. Palabra del Señor.
℟. Gloria a Ti, Señor, Jesús.
HOMILIA
07:20
Padre Don: José Blanco:
Sentaos un momento, el dolor, el sacrificio, el sufrimiento, la encarcelación, como ocurre en la Primera Lectura de hoy. Son como digamos elementos fundamentales también en nuestra de nuestra Fe. Porque vemos a estos Primeros Discípulos de las Primitivas Comunidades Cristianas. Como por predicar el Evangelio por dar testimonio del amor de Jesús, pues sufren todo este tipo de adversidades. Hoy los vemos a Pablo a Silas y a otros más los han pegado una paliza, que los han vamos vapuleado de todas las maneras y para colmo encima les meten en la cárcel.
08:21
Padre Don: José Blanco:
Están en Filipos que es una ciudad Romana, una ciudad pagana y sufren todo eso. Pero todo eso ¿por qué y para qué? pues para que la Fe progrese como vamos a seguir viendo en la Primera Lectura de hoy. Es verdad, la gente se amotina, los magistrados ordenan que les arranquen los vestidos y que los azotes. Los muelen a palos, los meten en la cárcel, pero el Espíritu de Dios, el poder de Dios es mucho más grande que el poder de los hombres. Y estando como están en la cárcel, llega ese Espíritu del Señor que hace pues eso. Que todas las puertas se abran, que retumben las paredes.
09:18
Padre Don: José Blanco:
Un terremoto tan violento, que temblaron los cimientos de la cárcel. ¿Y todo eso por qué? para que el carcelero y su familia se pregunten: «¿que tenemos que hacer para salvarnos?» Vosotros sois enviados de Dios, esto lo demuestra lo que está pasando. El carcelero: «¿señores que tengo que hacer para salvarme?» Le contestaron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia». Es decir, el sufrimiento, las adversidades, hacen que la Fe progrese en un pueblo pagano cómo era la ciudad de Filipos.
10:03
Padre Don: José Blanco:
Y aquellas horas de la noche nos dice, el carcelero los tomó consigo, les lavó las heridas y se Bautizó con todos los suyos. Y se Celebró una fiesta. Qué grande es esto, efectivamente muchas veces, el transmitir la Fe, el dar testimonio de la Fe. El predicar el Amor de Dios en el mundo, no lleva a eso al sufrimiento, al descorazonamiento, a que nos den la espalda y eso fue en la Iglesia Primitiva y sigue siendo hoy. En muchos lugares del mundo, rara es la semana que no tengamos una noticia de que sea he puesto una bomba, o se ha disparado contra una Iglesia Cristiana.
11:02
Padre Don: José Blanco:
A veces no es Católica, a veces es Protestante, otras veces es Católica. Una Iglesia Cristiana, una Iglesia de Cristo hace 10 a 12 días fue en Nigeria, una vez más. La semana pasada en Centroáfrica, una vez más, también. ¿Por qué? pues por qué el Testimonio Cristiano molesta, el Testimonio Cristiano, el Testimonio de Fe. Para algunos sectores de algunas sociedades, de algunos países, pues no deja de ser molesto. Por eso os digo que afortunadamente la Fe Cristiana progresa y avanza pero a costa del sacrificio, a costa del sufrimiento, a costa frecuentemente del derramamiento de sangre Cristiana.
12:01
Padre Don: José Blanco:
Pero el Espíritu del Señor, sigue estando con nosotros, el Espíritu de Jesús sigue estando presente hoy también en nuestras Comunidades. Ese Espíritu del que hablaba el propio Jesús en el Evangelio de hoy. Está cercana ya su muerte y entonces les habla a los Discípulos y que no estén tristes, porque anuncia su muerte. Que no estén tristes, que tienen que estar alegres, porque entonces es cuando vendrá cuando Él se vaya. Es cuando vendrá el Espíritu Santo, se derramará el Espíritu Santo sobre todos nosotros para que seamos en nuestras vidas Testigos de ese Amor de Dios al mundo.
12:58
Padre Don: José Blanco:
Manifestado por el propio Jesucristo y así dice: «os conviene que yo me vaya, porque si no me voy no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio si me voy os lo enviaré». Y es verdad, ellos no entienden prácticamente nada de lo que está ocurriendo, cuando Jesús les habla de su Pasión, de su Muerte, de su Resurrección prácticamente no lo entienden. Lo escuchan, pero bueno se quedan ahí como diciendo: «esto de que irá». Es el Espíritu cuando se derrama sobre ellos, cuando empiezan a ver la luz, empiezan a entenderlo todo y por eso Jesús les dice: «que no estén tristes, que estén alegres, porque cuando él envíe su Espíritu entonces lo entenderán todo».
13:57
Padre Don: José Blanco:
Os lo enviaré y cuando os lo envíe el mundo se enterará. Se enterará de que yo he estado aquí, que este pueblo, el pueblo Judío no ha creído en mí y ese su gran pecado. Y que el príncipe de este mundo, el diablo, será condenado. Cristo será el vencedor, Cristo será el triunfador sobre el pecado y sobre la muerte. Pero el Espíritu, es el que hace que los Primeros Discípulos, lo empiecen a entender, lo empiecen a comprender. Ese Espíritu sigue estando también presente entre nosotros, en nuestras comunidades.
14:54
Padre Don: José Blanco:
Lo hemos recibido todos y cada uno de nosotros en el Bautismo, lo hemos recibido en la Confirmación. Lo hemos recibido también en otros Sacramentos el pasado domingo en la Pascua del Enfermo. En el Sacramento de la Unción, también el Espíritu del Señor se derrama sobre nosotros. Y el Espíritu del Señor es el que hace que en cada Celebración ese Vino y ese Pan se conviertan en su cuerpo y en su sangre. El Espíritu del Señor, está presente en nuestras Comunidades, está presente en nuestros corazones. Entendamos por tanto y aunque pasemos por momentos de dificultad, por momentos de sufrimiento, por momentos de adversidad la Fe que nosotros podamos transmitir a nuestros hermanos progresará.
16:00
Padre Don: José Blanco:
Esa Fe que tiene que ser algo vivo en nuestros corazones. No solamente una Fe de palabra, una Fe intelectual, no, no. Una Fe que nos haga vivir el Amor de Dios en nuestro mundo y en nuestra sociedad. Al Celebrar ahora la Eucaristía pidámosle al Señor que ese Espíritu que convierte el Pan y el Vino en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo. Y que nosotros lo recibimos que al recibirlo transforme también nuestros corazones y seamos Testigos del Amor de Dios manifestado en Jesucristo en nuestro mundo.
16:48
Padre Don: José Blanco:
En la sociedad, en el mundo en que vivimos, en nuestra ciudad y en nuestro barrio. Pidamoselo así al Señor al Celebrar la Eucaristía.
PETICIONES
17:04
Padre Don: José Blanco:
Encomendemos hermanos a Cristo nuestro mediador sentado a la diestra del padre los deseos y las necesidades de todos los hombres.
℣. Para que los Obispos Presbíteros
y todos los que tienen la misión
de anunciar la Palabra de Dios
viven sumergidos en su contemplación
y se dejen guiar por esta misma
palabra que anuncian
nuestros hermanos.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que cuantos buscan
sinceramente el camino
de la verdad descubran
en Jesucristo y en su Iglesia
al Dios por el que suspiran.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que los que en medio
de sus pruebas se sienten
descorazonados descubran la fuerza
de Cristo viviente y vean
iluminado su camino.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Por los enfermos sus cuidadores
y familiares para que el Señor
les colme de paz y bendiciones.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que nuestros familiares
y amigos difuntos participen
de la gloria del Señor Resucitado.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
18:17
Padre Don: José Blanco:
℣. Señor Jesucristo
tú que has recibido todo poder
en el cielo y en la tierra
manifiestas tu omnipotencia
escuchando nuestras peticiones
tú que vives y reinas glorioso
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
Padre Don: José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
℣. El Dios de la Vida que ha Resucitado a Jesucristo rompiendo las ataduras de la muerte esté con todos vosotros.
Y con tu espíritu.
00:31
Padre Don: José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
00:44
Padre Don: José Blanco:
Hermanos buenos días, sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la 6ª Semana de Pascua. Vamos avanzando ya y el Tiempo de Pascua va terminando pero todavía tenemos que gozar de ese clima de alegría y de esperanza por el Señor Resucitado. Un saludo muy cordial y cercano a todos aquellos hermanos nuestros, que a través del Canal 13 Televisión se unen a nosotros en la Celebración. Y ahora en un momento de silencio pedimos perdón al Señor por nuestros pecados.
01:36
Padre Don: José Blanco:
℣. Tú que eres la plenitud
de la verdad y de la gracia
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que te has hecho pobre
para enriquecernos
℣. Crito, Ten Piedad
℟. Crito, Ten Piedad
℣. Tú porque has venido
para hacer de nosotros
tu pueblo Santo
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedadn
01:57
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios Todopoderoso
Tenga Misericordia de Nosotros
Perdone Nuestros Pecados
y Nos Lleve a la Vida Eterna.
℟. Amen.
02:05
Padre Don: José Blanco:
Oremos.
que tu pueblo Señor
resulte siempre al verse
renovado y rejuvenecido
en el Espíritu
y que la alegría de haber
recobrado la adopción
filial afiance
su esperanza de Resucitar
gloriosamente
por Nuestro Señor Jesucristo tu Hijo
que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 16, 22-34 1ª lectura: Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia.
02:48
Lectora de la Primera Lectura: - En aquellos días, la plebe de Filipos se amotinó contra Pablo y Silas, y los magistrados ordenaron que les arrancaran los vestidos y que los azotaran con varas; después de molerlos a palos, los metieron en la cárcel, encargando al carcelero que los vigilara bien; según la orden recibida, él los cogió los metió en la mazmorra y les sujetó los pies en el cepo.
A eso de media noche, Pablo y Silas oraban cantando himnos a Dios. Los otros presos los escuchaban. De repente, vino una terremoto tan violento que temblaron los cimientos de la cárcel. Al momento se abrieron todas las puertas, y a todos se les soltaron las cadenas. El carcelero se despertó y, al ver las puertas de la cárcel de par en par, sacó la espada para suicidarse, imaginando que los presos se habían fugado. Pero Pablo lo llamó a gritos, diciendo:
«No te hagas daño alguno, que estamos todos aquí».
03:54
Lectora de la Primera Lectura: - El carcelero pidió una lámpara, saltó dentro, y se echó temblando a los pies de Pablo y Silas; los sacó fuera y les preguntó:
«Señores, ¿qué tengo que hacer para salvarme?». Le contestaron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia».
Y le explicaron la palabra del Señor, a él y a todos los de su casa.
A aquellas horas de la noche, el carcelero los tomo consigo, les lavó las heridas, y se bautizó en seguida con todos los suyos; los subió a su casa, les preparó la mesa, y celebraron una fiesta de familia por haber creído en Dios.
℣. Palabra de Dios.
℟. Te alabamos, Señor.
04:39
Lector del Salmo Responsorial:
Salmo: Sal 137, 1-2a. 2bc y 3. 7c-8 Tu derecha me salva, Señor.
℣. Tu derecha me salva, Señor.
℟. Tu derecha me salva, Señor.
℣. Te doy gracias, Señor,
de todo corazón; porque
escuchaste las palabras
de mi boca; delante
de los ángeles tañeré
para ti, me postraré
hacia tu santuario. ℟.
℣. Daré gracias a tu nombre
por tu misericordia
y tu lealtad, porque
tu promesa supera tu fama
Cuando te invoqué,
me escuchaste, acreciste
el valor en mi alma. ℟.
℣. Tu derecha me salva.
El Señor completará
sus favores conmigo:
Señor, tu misericordia
es eterna, no abandones
la obra de tus manos. ℟.
05:28
Canto del Aleluya:
Aleluya Col 3, 1 Os enviaré el espíritu de la verdad - dice el Señor -, él os guiará hasta la verdad plena.
05:27
Canto del Aleluya:
℣. Aleluya, aleluya, aleluya
℣. Os enviaré el espíritu
de la verdad
- dice el Señor -,
él os guiará hasta
la verdad plena. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
✠ Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 5-11 Evangelio: Si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito
06:13
Padre Don: José Blanco:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Juan.
℟. Gloria a ti Señor Jesús.
06:24
Diácono de la Basílica - Evangelio: - En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: “¿Adónde vas?” Sino que, por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. Sin embargo, os digo la verdad: os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio, si me voy, os lo enviaré. Y cuando venga, dejará convicto al mundo acerca de un pecado, de una justicia y de una condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia, porque me voy al Padre, y no me veréis; de una condena, porque el príncipe de este mundo está condenado».
℣. Palabra del Señor.
℟. Gloria a Ti, Señor, Jesús.
HOMILIA
07:20
Padre Don: José Blanco:
Sentaos un momento, el dolor, el sacrificio, el sufrimiento, la encarcelación, como ocurre en la Primera Lectura de hoy. Son como digamos elementos fundamentales también en nuestra de nuestra Fe. Porque vemos a estos Primeros Discípulos de las Primitivas Comunidades Cristianas. Como por predicar el Evangelio por dar testimonio del amor de Jesús, pues sufren todo este tipo de adversidades. Hoy los vemos a Pablo a Silas y a otros más los han pegado una paliza, que los han vamos vapuleado de todas las maneras y para colmo encima les meten en la cárcel.
08:21
Padre Don: José Blanco:
Están en Filipos que es una ciudad Romana, una ciudad pagana y sufren todo eso. Pero todo eso ¿por qué y para qué? pues para que la Fe progrese como vamos a seguir viendo en la Primera Lectura de hoy. Es verdad, la gente se amotina, los magistrados ordenan que les arranquen los vestidos y que los azotes. Los muelen a palos, los meten en la cárcel, pero el Espíritu de Dios, el poder de Dios es mucho más grande que el poder de los hombres. Y estando como están en la cárcel, llega ese Espíritu del Señor que hace pues eso. Que todas las puertas se abran, que retumben las paredes.
09:18
Padre Don: José Blanco:
Un terremoto tan violento, que temblaron los cimientos de la cárcel. ¿Y todo eso por qué? para que el carcelero y su familia se pregunten: «¿que tenemos que hacer para salvarnos?» Vosotros sois enviados de Dios, esto lo demuestra lo que está pasando. El carcelero: «¿señores que tengo que hacer para salvarme?» Le contestaron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia». Es decir, el sufrimiento, las adversidades, hacen que la Fe progrese en un pueblo pagano cómo era la ciudad de Filipos.
10:03
Padre Don: José Blanco:
Y aquellas horas de la noche nos dice, el carcelero los tomó consigo, les lavó las heridas y se Bautizó con todos los suyos. Y se Celebró una fiesta. Qué grande es esto, efectivamente muchas veces, el transmitir la Fe, el dar testimonio de la Fe. El predicar el Amor de Dios en el mundo, no lleva a eso al sufrimiento, al descorazonamiento, a que nos den la espalda y eso fue en la Iglesia Primitiva y sigue siendo hoy. En muchos lugares del mundo, rara es la semana que no tengamos una noticia de que sea he puesto una bomba, o se ha disparado contra una Iglesia Cristiana.
11:02
Padre Don: José Blanco:
A veces no es Católica, a veces es Protestante, otras veces es Católica. Una Iglesia Cristiana, una Iglesia de Cristo hace 10 a 12 días fue en Nigeria, una vez más. La semana pasada en Centroáfrica, una vez más, también. ¿Por qué? pues por qué el Testimonio Cristiano molesta, el Testimonio Cristiano, el Testimonio de Fe. Para algunos sectores de algunas sociedades, de algunos países, pues no deja de ser molesto. Por eso os digo que afortunadamente la Fe Cristiana progresa y avanza pero a costa del sacrificio, a costa del sufrimiento, a costa frecuentemente del derramamiento de sangre Cristiana.
12:01
Padre Don: José Blanco:
Pero el Espíritu del Señor, sigue estando con nosotros, el Espíritu de Jesús sigue estando presente hoy también en nuestras Comunidades. Ese Espíritu del que hablaba el propio Jesús en el Evangelio de hoy. Está cercana ya su muerte y entonces les habla a los Discípulos y que no estén tristes, porque anuncia su muerte. Que no estén tristes, que tienen que estar alegres, porque entonces es cuando vendrá cuando Él se vaya. Es cuando vendrá el Espíritu Santo, se derramará el Espíritu Santo sobre todos nosotros para que seamos en nuestras vidas Testigos de ese Amor de Dios al mundo.
12:58
Padre Don: José Blanco:
Manifestado por el propio Jesucristo y así dice: «os conviene que yo me vaya, porque si no me voy no vendrá a vosotros el Paráclito. En cambio si me voy os lo enviaré». Y es verdad, ellos no entienden prácticamente nada de lo que está ocurriendo, cuando Jesús les habla de su Pasión, de su Muerte, de su Resurrección prácticamente no lo entienden. Lo escuchan, pero bueno se quedan ahí como diciendo: «esto de que irá». Es el Espíritu cuando se derrama sobre ellos, cuando empiezan a ver la luz, empiezan a entenderlo todo y por eso Jesús les dice: «que no estén tristes, que estén alegres, porque cuando él envíe su Espíritu entonces lo entenderán todo».
13:57
Padre Don: José Blanco:
Os lo enviaré y cuando os lo envíe el mundo se enterará. Se enterará de que yo he estado aquí, que este pueblo, el pueblo Judío no ha creído en mí y ese su gran pecado. Y que el príncipe de este mundo, el diablo, será condenado. Cristo será el vencedor, Cristo será el triunfador sobre el pecado y sobre la muerte. Pero el Espíritu, es el que hace que los Primeros Discípulos, lo empiecen a entender, lo empiecen a comprender. Ese Espíritu sigue estando también presente entre nosotros, en nuestras comunidades.
14:54
Padre Don: José Blanco:
Lo hemos recibido todos y cada uno de nosotros en el Bautismo, lo hemos recibido en la Confirmación. Lo hemos recibido también en otros Sacramentos el pasado domingo en la Pascua del Enfermo. En el Sacramento de la Unción, también el Espíritu del Señor se derrama sobre nosotros. Y el Espíritu del Señor es el que hace que en cada Celebración ese Vino y ese Pan se conviertan en su cuerpo y en su sangre. El Espíritu del Señor, está presente en nuestras Comunidades, está presente en nuestros corazones. Entendamos por tanto y aunque pasemos por momentos de dificultad, por momentos de sufrimiento, por momentos de adversidad la Fe que nosotros podamos transmitir a nuestros hermanos progresará.
16:00
Padre Don: José Blanco:
Esa Fe que tiene que ser algo vivo en nuestros corazones. No solamente una Fe de palabra, una Fe intelectual, no, no. Una Fe que nos haga vivir el Amor de Dios en nuestro mundo y en nuestra sociedad. Al Celebrar ahora la Eucaristía pidámosle al Señor que ese Espíritu que convierte el Pan y el Vino en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo. Y que nosotros lo recibimos que al recibirlo transforme también nuestros corazones y seamos Testigos del Amor de Dios manifestado en Jesucristo en nuestro mundo.
16:48
Padre Don: José Blanco:
En la sociedad, en el mundo en que vivimos, en nuestra ciudad y en nuestro barrio. Pidamoselo así al Señor al Celebrar la Eucaristía.
PETICIONES
17:04
Padre Don: José Blanco:
Encomendemos hermanos a Cristo nuestro mediador sentado a la diestra del padre los deseos y las necesidades de todos los hombres.
℣. Para que los Obispos Presbíteros
y todos los que tienen la misión
de anunciar la Palabra de Dios
viven sumergidos en su contemplación
y se dejen guiar por esta misma
palabra que anuncian
nuestros hermanos.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que cuantos buscan
sinceramente el camino
de la verdad descubran
en Jesucristo y en su Iglesia
al Dios por el que suspiran.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que los que en medio
de sus pruebas se sienten
descorazonados descubran la fuerza
de Cristo viviente y vean
iluminado su camino.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Por los enfermos sus cuidadores
y familiares para que el Señor
les colme de paz y bendiciones.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
℣. Para que nuestros familiares
y amigos difuntos participen
de la gloria del Señor Resucitado.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos Oyénos.
18:17
Padre Don: José Blanco:
℣. Señor Jesucristo
tú que has recibido todo poder
en el cielo y en la tierra
manifiestas tu omnipotencia
escuchando nuestras peticiones
tú que vives y reinas glorioso
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
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